
Municipios de los caminos referenciados: Marratxi, Binissalem y Ferrerías. Accesos: El Camí Sa Bomba y el acceso al tramo del Camí des Raiguer es fácil pudiendo llegar a las vías con vehículo casi al comienzo de los caminos; el tramo del Castillo de Santa Agueda requiere una caminata de unos veinticinco minutos cuesta arriba. Tipo de restos arqueológicos: restos de calzadas de origen romano o medieval.
Las Baleares romanas contaron con importantes puertos. Situadas en la ruta que unía Roma con Tarraco y la Bética, acogieron un intenso tráfico marítimo. Los puertos fueron el motor económico de las islas. Por ellos entraban productos exteriores. Por otro lado, servían para exportar productos insulares como pueden ser el vino, cereal, aceite, salazones y la sal que era entonces comercio de estado
Las calzadas romanas fueron una obra de ingeniería de piedra absolutamente definitiva permitiendo la expansión del imperio, comercio y civilización romanas por toda la cuenca mediterránea. Resulta impresionante ver como han sobrevivido hasta nuestros días calzadas romanas, que, tras 2.000 años, siguen todavía en uso.

Para canalizar toda esta actividad económica, se construyen importantes obras públicas. Así, se tiene constancia de al menos dos grandes vías romanas. Una que unía Palma con Pollentia, atravesando el Raiguer, y la segunda comunicando Mago con Iamo, es decir, los dos extremos de Menorca.
De la via que unía Palma con Pollentia se tiene constancia de dos posibles restos de calzada. Una sería un tramo de aproximadamente cien metros denominado Camí Sa Bomba, que tiene una anchura de 5 pasos -metros- con fajas longitudinales a cada paso. Es de suponer que estas fajas realizaban la función de marcar las leneas de conducción al tiempo que reforzaban la calzada en la parte de mayor desgaste, en contacto con las llantas de hierro de los carros. Adicionalmente, a cada 4 pasos se encuentra una faja transversal que atraviesa la calzada de lado a lado.

No obstante, los restos aparecidos son dudosos y no hay constancia de una via típicamente romana por sus características constructivas, pero aunque nunca ha aparecido ningún milario, pocas dudas puede haber de que las hubo.
Las fajas debían estar formadas por piedras clavadas de punta, por tanto, más reforzadas que el resto, ejerciendo una función de marco que se rellenaba con adoquines de piedra, quedando estos fajados y sujetos en rectángulos de 4 x 1 pasos/metros. La simplicidad del método nos demuestra que la unidad de medida utilizada ha sido el paso humano (1 metro), de acuerdo con la teoría de que las medidas de la arquitectura parten de las medidas humanas.

El otro posible resto de calzada, aunque en mi opinión bastante menos evidente, es el Camí des Raiguer situado entre Binissalem y Alaró. Hay que tener en cuenta, que debido a la buena técnica constructiva de las calzadas romanas, estas se fueron utilizando también en época medieval. Un claro ejemplo se puede encontrar en el empedrado de acceso a la posesión de Raixa.
La red de estos posibles caminos romanos en Menorca presentaba un notable desarrollo y subsisten aún de ellos bastantes tramos en buen estado de conservación. Una vía principal, de la que han aparecido algunas piedras del tiempo de Trajano, iba de un extremo a otro de la isla uniendo Mago con Iamo sus dos principales ciudades. De ella arrancaban los ramales que se dirigían a Sanisera, a la montaña de Santa Àgueda, a Son Bou, a Cales Coves y a Cala de Sant Esteve, lugares estos precisamente notables como centros de atracción humana desde tiempos remotos.

( Img: HAMEY: Los ingenieros romanos, Madrid, 1990)
ninguna calzada que mostrais es romana,cualquier persona con 10 minutos curioseando por internet puede darse cuenta
Gracias Lluis por tus comentarios. No soy especialista en esta área. Soy una mente inquieta sobre estos temas y los fotografío después de haberme documentado en páginas de especialistas que indican que sí son calzadas romanas o que probablemente lo sean. Un saludo